El nuevo director de la CAR Cundinamarca, Alfred Ballesteros, habla de las críticas a su reelección, de las relaciones que tendrá con un gobierno que no lo apoya y de los proyectos claves que tienen la Región y Bogotá. Entrevista.
El recién elegido director de la CAR Cundinamarca, Alfred Ballesteros, se muestra consciente de los desafíos que enfrenta al asumir su nuevo cargo. En una entrevista exclusiva, Ballesteros habla sobre las críticas que ha recibido por su reelección, así como las dificultades de trabajar en un gobierno que no lo respalda. Sin embargo, también se enfoca en los proyectos importantes que tiene la región, como la gestión integral de recursos hídricos.
Ballesteros reconoce que la realidad del mundo ha cambiado en los últimos 12 años, especialmente en relación al cambio climático. Ante esta nueva realidad, considera que las autoridades ambientales deben adaptarse y ayudar a la sociedad en este proceso. En este sentido, la gestión integral de recursos hídricos se convierte en una prioridad para la región, que concentra cerca de 12 millones de habitantes y una gran parte del PIB del país.
En cuanto a las críticas que ha recibido por representar el continuismo, Ballesteros aclara que él no se considera una continuidad de la administración anterior. Sin embargo, destaca que su experiencia como director encargado y su conocimiento de la CAR lo hacen apto para el cargo. Además, resalta su deseo de trabajar en cooperación con el Gobierno Nacional, ya que tuvo la oportunidad de trabajar con el presidente Petro cuando fue alcalde de Bogotá.
Respecto a las posibles oposiciones que pueda enfrentar por parte del Gobierno, Ballesteros muestra confianza en que se abrirán espacios de diálogo. Ya ha tenido una conversación con la delegada del presidente y espera poder reunirse con el presidente y la ministra antes de su posesión. Según él, no hay riesgo de enfrentar oposición por parte de ellos.
En cuanto a las reformas propuestas por la ministra de Ambiente, Ballesteros considera que es necesario ajustar el Sistema Nacional Ambiental. Sin embargo, destaca que esta discusión debe llevarse a cabo a nivel nacional, en el marco del Congreso de la República y con la participación de la sociedad civil.
En relación a temas específicos como la extensión de la avenida Boyacá por la reserva Thomas van der Hammen y el paso de la autopista Norte por Torca y Guaymaral, Ballesteros se abstiene de pronunciarse, ya que estos temas serán puestos a consideración de la autoridad ambiental y él deberá tomar decisiones al respecto.
En cuanto al crecimiento desbordado de los municipios de la Sabana de Bogotá y los problemas de infraestructura y servicios que enfrentan, Ballesteros considera que es necesario detener este crecimiento y garantizar que los municipios solucionen primero sus necesidades básicas. Destaca la importancia de un ordenamiento del territorio en función del recurso hídrico.
En relación a la minería del carbón y las esmeraldas, Ballesteros señala que el Gobierno Nacional está liderando un modelo de transición energética que busca reducir las tragedias relacionadas con estas actividades. La CAR no otorga títulos ni realiza seguimiento a la seguridad minera, pero trabajarán en línea con el Gobierno para garantizar un desarrollo sostenible.
En cuanto a las críticas de politización de las CAR, Ballesteros reconoce que siempre hay espacio para mejorar en este aspecto. Destaca la importancia de la meritocracia en la selección de los funcionarios y la necesidad de mantener un enfoque técnico en la toma de decisiones.
Finalmente, en relación a proyectos específicos como la Ptar Salitre y el proyecto de Canoas, Ballesteros destaca que estos serán prioridades una vez asuma su cargo. Trabajarán en colaboración con el gerente del Acueducto de Bogotá y seguirán las órdenes judiciales relacionadas con estos proyectos. Considera que ambos proyectos son fundamentales para descontaminar la cuenca media del río Bogotá.
En resumen, Alfred Ballesteros asume su nuevo cargo como director de la CAR Cundinamarca con conciencia de los desafíos que enfrenta. Está comprometido en abordar los retos del cambio climático y trabajar en proyectos importantes para la región y Bogotá. Confía en poder establecer relaciones positivas con el Gobierno y aboga por ajustes necesarios en el Sistema Nacional Ambiental.